El Congreso de la República hundió el proyecto de ley que daba la libertad a los colombianos de divorciarse libremente, por la voluntad de una sola de las partes.
En la actualidad el proceso de divorcios es un trámite difícil de llevar y en estos casos la pareja debe ir a donde un juez y demostrar alguna de las nueve causales de divorcio y de esta manera poder llevar el proceso de divorcio.
Con este proyecto de ley lo que se quería era reducir el proceso al añadir una décima casual, la cual era que la sola voluntad de uno de los cónyuges como causal de divorcio y de esta manera cualquier persona que quisiera divorciarse lo podía hacer.
Esta causal habla del derecho de toda persona de solicitar el divorcio sin que el proceso fuera largo y en algunas ocasiones difícil de llevar depende las circunstancias ya sea por infidelidad, abandono malos tratos, etc.
Esta iniciativa es idea de los representantes Juan Fernando Reyes, Katherine Miranda y Julián Peinado, pretendía el juez se concentrará en los compromisos hacia adelante de la pareja que se quería divorciar.